Japón es hogar de una especie milenaria, de un fósil viviente: la salamandra gigante. Este anfibio, que llega a vivir más de 80 años, es capaz de alcanzar los casi 1.80 metros de longitud y los casi 40 kilos de peso. En Japón son sumamente queridas y respetadas, por lo que año con año se celebra, en su honor, el festival Hanzaki. Durante un largo recorrido, un grupo de personas bailan alrededor de dos enormes figuras (que representan a la hembra y al macho, respectivamente) de este anfibio mientras los espectadores cantan alegremente.
Debido al crecimiento demográfico en Japón, poco a poco el hogar de esta especie está siendo amenazado, por ello se han creado nidos para preservar a la especie que también se encuentra en peligro de extinción.